Los resultados electorales en Estados Unidos no sólo representan el triunfo demócrata, sino también dejan ver un significativo avance de las mujeres conquistando terrenos que antes parecían inalcanzables, tal como lo hizo Kamala D. Harris.
Kamala es la primera mujer en ganar la vicepresidencia estadounidense, durante casi 250 años de historia independiente del país norteamericano. Antes de ella, otras dos mujeres ya habían aspirado al puesto sin conseguir el triunfo.
La afroamericana de 56 años es también la primera persona negra en ocupar el cargo, que además le otorga la presidencia del Senado de Estados Unidos.
En el año 2017, Kamala D. Harris fue juramentada como Senadora de los Estados Unidos por el estado de California, la segunda mujer afroamericana y la primera senadora sur asiática-Americana de la historia. Ella sirve en el Comité de Seguridad Nacional y Asuntos Gubernamentales, Comité Selecto de Inteligencia, Comité Judicial, y el Comité del Presupuesto.
Kamala ha pasado su vida luchando contra la injusticia. Es una pasión que comenzó gracias a su madre, Shyamala, una inmigrante india-americana, activista, e investigadora del cáncer de mama.
Al crecer en Oakland, Kamala vio el Movimiento de los Derechos Civiles desde pequeña. A través del ejemplo de líderes valientes como Thurgood Marshall, Constance Baker Motley y Charles Hamilton Houston, Kamala aprendió el tipo de carácter que se requiere para enfrentarse a las personas con poder, y juró dedicar su vida a luchar por aquellos que no pueden defenderse.
Después de obtener su licenciatura de la Universidad de Howard y una licenciatura en ley de la Universidad de California, Hastings, comenzó su carrera en la Fiscalía del Condado de Alameda.
En el año 2003, Kamala se convirtió en fiscal de distrito de la ciudad y el condado de San Francisco. Entre sus logros como fiscal de distrito, Harris comenzó un programa que brinda a las personas condenadas por delitos relacionados a drogas, por primera vez, la posibilidad de obtener un diploma de escuela secundaria y encontrar empleo.
Después de haber cumplido dos períodos como fiscal de distrito de San Francisco, Kamala fue elegida como la primera afroamericana y la primera mujer en servir como fiscal general de California. En este puesto, trabajó incansablemente para responsabilizar a las corporaciones y proteger a las personas más vulnerables del estado.
Sobre el curso de sus casi dos periodos como fiscal general, Kamala ganó un acuerdo de $25 mil millones para los dueños de casas en California afectados por la crisis hipotecaria, defendió la ley histórica de California del cambio climático, protegió la Ley del Cuidado de Salud a Bajo Precio, ayudó a ganar la igualdad de matrimonio para todos los Californianos y procesó pandillas transnacionales que traficaban en armas, drogas y seres humanos.
En el Senado de los Estados Unidos, la misión de Kamala sigue siendo la misma: luchando por los derechos de todas las comunidades en California. Desde que asumió el cargo de Senadora, ha presentado y copatrocinado legislación para aumentar los salarios de los trabajadores, reformar nuestro sistema de justicia penal, hacer de la asistencia médica un derecho para todos los estadounidenses, abordar la epidemia del abuso de sustancias, apoyar a veteranos y familias militares y ampliar el acceso al cuidado infantil para padres que trabajan
Es un honor y privilegio para Kamala trabajar en nombre de la gente de California. Ella vive en Los Ángeles con su esposo, Doug Emhoff, y es madrastra de Ella y Cole Emhoff.