REDACCION DELAZONAORIENTAL..NET
GINEBRA – Llegar a cero: Cero nuevas infecciones por el VIH. Cero muertes relacionadas con el SIDA. Cero discriminación es el tema del Día Mundial del SIDA 2012. Dada la propagación actual de la epidemia, llegar a cero puede parecer difícil, pero se están haciendo progresos importantes.
En 2011 hubo 2,5 millones de nuevos casos de infección por el VIH, y se calcula que 1,7 millones de personas murieron. Eso representa 700 000 nuevas infecciones menos que hace 10 años y 600 000 muertes menos que en 2005.
Gran parte de los progresos se atribuyen al tratamiento de las personas infectadas con antirretrovirales, medicamentos que pueden salvarles la vida. Esos medicamentos reducen la cantidad de virus en la sangre, lo que aumenta la posibilidad de que el paciente conserve la salud y reduce el riesgo de que pueda transmitir el virus a otra persona. En 2011, en la Asamblea General de las Naciones Unidas, los gobiernos acordaron como meta que en 2015 haya 15 millones de personas infectadas por el VIH en tratamiento con antirretrovirales. Las últimas estadísticas mundiales indican que este objetivo es alcanzable, siempre que los países puedan mantener los esfuerzos actuales.
«Muchos países se enfrentan a dificultades económicas, pero la mayoría se las arreglan para seguir ampliando el acceso a los antirretrovirales», ha dicho el doctor Gottfried Hirnschall, Director del Departamento de VIH de la Organización Mundial de la Salud. «La meta de 2015 parece más factible ahora que nunca.»
Actualmente, en los países de ingresos bajos y medianos hay 8 millones de personas con acceso al tratamiento que necesitan, frente a solo 0,4 millones en 2003.
«El reto ahora es asegurar que los progresos mundiales se reproduzcan en todos los lugares y niveles para que todas las personas, vivan donde vivan y sean quienes sean, puedan obtener tratamiento antirretroviral cuando lo necesiten», ha añadido el Dr. Hirnschall.
Sigue habiendo grupos de población sin acceso a la prevención y al tratamiento del VIH en todas las regiones del mundo. Los niños, por ejemplo, se están quedando muy atrás: sólo el 28% de los que necesitan antirretrovirales pueden obtenerlos.
Hay muchas razones para ello. A veces, los factores geográficos dificultan la prestación de servicios. Los problemas legales y de estigmatización y discriminación son obstáculos frecuentes al acceso a una atención eficaz. Las adolescentes, los trabajadores del sexo, los hombres que tienen relaciones homosexuales y los consumidores de drogas siguen siendo vulnerables y marginados. Los migrantes suelen tener un acceso limitado a los servicios de salud, con las consiguientes dificultades para obtener los servicios que necesitan, entre ellos el suministro de antirretrovirales.
Una de las prioridades de la OMS es ayudar a los países a acercarse a la cobertura sanitaria universal. La Organización colabora con sus asociados para combatir la estigmatización y la discriminación, y apoya a los países en la mejora de la prestación de servicios en todas las áreas geográficas, por ejemplo, aumentando el acceso a los medicamentos y medios de diagnóstico o impulsando mecanismos que alienten a los profesionales sanitarios a trabajar en zonas remotas. Asimismo, apoya el establecimiento y mantenimiento de mecanismos de financiación que garanticen que nadie se vea inmerso en la pobreza porque tenga que pagar los servicios de su propio bolsillo.
Mientras los países redoblan sus esfuerzos para ofrecer antirretrovirales a todos los que los necesitan, hay cada vez más pruebas de que un uso más amplio y estratégico de estos medicamentos aporta nuevos beneficios. Los estudios demuestran que los mismos medicamentos que sirven para salvar vidas y mantener a la gente saludable también pueden impedir la transmisión sexual y la transmisión maternoinfantil del VIH.
A principios de 2012, la OMS publicó nuevas directrices para el tratamiento de las personas con VIH cuyas parejas no están infectadas: se calcula que cerca de la mitad de las personas VIH-positivas tienen parejas VIH-negativas. En la actualidad la Organización recomienda que se ofrezca tratamiento antirretroviral a los miembros seropositivos de la pareja, independientemente del estado de su sistema inmunitario, con el fin de reducir la probabilidad de transmisión del VIH al miembro no infectado.
Algunos países también están considerando la posibilidad de iniciar el tratamiento en una etapa aún más temprana de la infección por VIH, y de ofrecer a todas las embarazadas VIH-positivas tratamiento antirretroviral de por vida.
La OMS está examinando nuevas investigaciones científicas y experiencias de los países con el fin de publicar a mediados de 2013 una guía actualizada y consolidada sobre el uso de los antiretrovirales.