El béisbol, pasatiempo nacional del pueblo dominicano, está de regreso en su temporada otoño invernal 2021-22, y uno de sus más connotados miembros, los Tigres del Licey salió por la puerta grande en la jornada de apertura al imponerse 4 carreras por 1 a los Leones del Escogido, en el encuentro escenificado en el Estadio Quisqueya Juan Marichal, de la Capital.
El duelo de este miércoles entre los “eternos rivales” tuvo previamente un pequeño acto protocolar en la que Samuel Pereyra, administrador general del Banco de Reservas, realizó el lanzamiento de la primera bola, junto a los ejecutivos de los Tigres, y de Vitelio Mejía, presidente de la Liga Dominicana de Beisbol (Lidom).
Pereyra estuvo acompañado del doctor José Joaquín Puello Herrera, como bateador de honor.
El certamen tiene en opción a la Copa BanReservas y dedicatoria especial al general Kalil Haché In Memoriam.
El derecho abridor de los Tigres, César Valdez (1-0) estuvo imponente en el box para llevarse el triunfo, en una actuación de 5.0 entradas sin carreras, tres hits, un boleto y dos ponchados.
El estelar cerrador de los azules, Jairo Asencio, tiró el noveno episodio para lograr su primer salvado, y ponchó uno.
La derrota recayó en el lanzador inicialista de los melenudos, Yoen Socarrás (0-1), quien cargó con el revés al laboral 3.2 innings, aceptó tres carreras -todas limpias-, le pegaron tres hits, dos boletos y seis ponches.
Por el Licey, el más sobresaliente con el madero lo fue el novato debutante Ronny Mauricio con un cuadrangular de dos carreras por el prado derecho en el segundo inning contra Socarrás, al encontrar en base a Dawel Lugo, luego de una transferencia.
La tercera anotación la remolcó Lugo con sencillo al left field que condujo a la goma a Hanley Ramírez, tras un inatrapable al bosque izquierdo y se robó la segunda base.
En el quinto, Nick Heath conectó un doblete al jardín izquierdo y anotó desde la segunda impulsado por Emilio Bonifacio con una rolata al siore stop en la que llegó quieto.
Los Leones tuvieron su única carrera en el sexto capítulo que empujó Brett Sullivan y anotó Francisco Urbáez.