Estados Unidos, en cambio, exhibió su poder, defensa y eficacia.
Giancarlo Stanton disparó un descomunal jonrón para tomar la ventaja, Adam Jones le robó un cuadrangular a Manny Machado y el anfitrión selló su boleto a las semifinales del Clásico el sábado tras vencer 6-3 al vigente campeón, que se despidió del torneo.
Los dominicanos se fueron de 11-1 con hombres en posición de anotar. También dejaron a ocho corredores esperando remolque en los senderos del Petco Park.
“Es muy difícil ganar un partido de pelota cuando tienes a 11 jugadores en base y no pudimos dar el batazo que nosotros necesitábamos”, dijo Tony Peña, el manager de la selección dominicana.
Arriba 2-0 y luego empatados 2-2, los dominicanos dispusieron de un par de ocasiones inmejorables para dar un golpe sobre la mesa.
La primera fue en el segundo inning al tener a corredores en primera y segunda sin outs. También generaron la misma circunstancia en el quinto, aunque con out.
Ninguna de las amenazas fructificó. Robinson Canó, el Jugador Más Valioso en el Clásico que conquistaron de manera invicta en 2013, falló en las dos entradas.
“No tengo que apuntar a ninguno”, dijo Peña. “No había ninguna clase de presión, pero tal vez quisieron hacer demasiado… tal vez estaban un poquito ansiosos”.
El cuadrangular de dos carreras de Stanton se fue al tercer piso del edificio Western Metal Supply Co., en la esquina del jardín izquierdo de Petco Park, dando a Estados Unidos una ventaja de 4-2 en el cuarto. El enorme batazo hizo delirar a los 43.002 espectadores que abarrotaron las gradas, y encaminó a los estadounidenses en la fase final del Dodger Stadium.
Puerto Rico, invicto tras seis partidos, disputará la primera semifinal el lunes contra Holanda. Estados Unidos se medirá el martes ante Japón.
Aunque varias de sus grandes figuras, como Mike Trout, Bryce Harper y Clayton Kershaw, rechazaron participar en el torneo, el manager de Estados Unidos Jim Leyland dio las gracias a quienes sí lo hicieron.
“Hubo mucha gente que respetuosamente lo declinó y no vamos a reprocharle nada a nadie”, manifestó Leyland. “Vamos a honrar a quienes aceptaron y están aquí. Nos clasificamos y de eso es de lo que hablamos (…) Y ahora mismo este es el único equipo que me importa y estos jugadores son los únicos jugadores que me importan”.
Tres episodios después del jonrón de Stanton, Adam Jones, nacido en San Diego, protagonizó una espectacular atrapada sobre la valla en la parte más alejada entre los jardines central y derecho para impedir un jonrón a Machado, su compañero de los Orioles de Baltimore.
“Sigo un poco sorprendido por haber llegado a esa bola”, dijo Jones agregando que “este es el estilo con el que juego. No me importa ir contra un muro o dos. Solo sigo a la pelota”.
Canó conectó entonces un vuelacercas a la izquierda que acercó a los dominicanos a 4-3.
Andrew McCutchen dio un respiro a Estados Unidos con un doble de dos carreras en el octavo y Luke Gregerson lanzó una novena entrada perfecta para cerrar el juego.
Es la segunda vez que Estados Unidos disputa las semifinales en cuatro ediciones del Clásico Mundial. La primera, en 2009, cayó ante Japón.
Los jugadores dominicanos, que en la primera fase en Miami se impusieron a Estados Unidos viniendo desde atrás, regresarán de vuelta con sus equipos de las Grandes Ligas. Terminaron con una foja de 1-2 en la segunda ronda, tras lograr un perfecto 3-0 en la inicial.
“El juego no se perdió por la alineación. El juego se perdió porque no bateamos en el momento oportuno”, comentó Peña.
Danny Duffy se llevó la victoria al admitir dos carreras, una de ellas limpia, y seis hits en más de cuatro innings en los que ponchó a uno y dio un boleto. Santana cargó con la derrota tras cuatro carreras y seis hits en tres innings y dos tercios con dos ponches.
“Hicimos todo lo posible para ganar, pero ellos jugaron mejor que nosotros”, indicó Santana. “Ellos aprovecharon cada oportunidad que tuvieron para anotar”.
En el otro partido disputado el sábado, Puerto Rico, ya clasificado para la siguiente ronda, vapuleó 13-2 a Venezuela.