REDACCIÓN DELAZONAORIENTAL.NET
Donald Trump, quien tiene prácticamente asegurada la candidatura presidencial del Partido Republicano, agendó su primer acto de campaña en New Mexico, el estado con el mayor porcentaje de hispanos en la nación y donde la gobernadora republicana hispana lo ha criticado previamente.
El sitio de internet de su campaña anunció el jueves que Trump realizará un mitin la tarde del martes en el Centro de Convenciones de Albuquerque, en momentos en que New Mexico se prepara para sus elecciones primarias dos semanas después, el 7 de junio.
La visita agendada de Trump al estado ocurre después de que la gobernadora de New Mexico, Susana Martinez, primera gobernadora latina del país y una estrella en ascenso dentro del Partido Republicano, ha criticado severamente sus pasadas declaraciones sobre inmigrantes mexicanos y respecto a México.
Trump ha prometido la construcción de un muro a lo largo de la frontera entre Estados Unidos y México, y el año pasado comparó a inmigrantes mexicanos con violadores y traficantes de drogas.
Martinez ha impulsado una reforma de inmigración integral y ha pedido a precandidatos que moderen su retórica en un contexto de fuertes sentimientos antiinmigración de algunos colegas republicanos.
Martinez ha dicho que no está lista para apoyar a Trump pero que quiere escuchar sobre sus planes para proteger las bases militares del estado. Martinez es una prominente recaudadora de fondos republicana en New Mexico y a nivel nacional como presidenta de la Asociación de Gobernadores Republicanos, un brazo recaudador de donaciones para campaña del Partido Republicano.
Un vocero de Martinez dijo que no sabía si la gobernadora asistirá al mitin de Trump en Albuquerque.
Richard Berry, alcalde republicano de Albuquerque que ha sido elegido en dos ocasiones con un fuerte apoyo hispano, no ha sido contactado para que asista al acto de campaña de Trump, según la portavoz Rhiannon Samuel.
Grupos defensores de los hispanos y de los derechos de inmigrantes han insinuado que Trump y sus partidarios podrían ver manifestaciones cuando se dirija a New Mexico.
“Pongámoslo de esta manera (…) definitivamente no lo vamos a recibir con gran hospitalidad”, dijo Ralph Arellanes, presidente de la Mesa Redonda Hispana de New Mexico.
Trump ha sido observado atentamente por defensores de inmigrantes por decir que impulsaría la deportación masiva de aproximadamente 11 millones de inmigrantes que viven en Estados Unidos sin permiso. Ha dicho además que apoyaría exigir que musulmanes se registren en un banco de datos.
Trump ya ha generado entusiasmo entre los latinos para votar en su contra en noviembre si gana oficialmente la nominación presidencial del Partido Republicano, dijo Isaac De Luna Navarro, un organizador de comunicaciones del grupo defensor de derechos de inmigrantes El Centro de Igualdad y Derechos, con sede en Albuquerque.
“Donald Trump se percatará durante su visita a New Mexico que él no representa los valores compartidos por los residentes de New Mexico y que su uso de retórica antiinmigrante no es bienvenida por las familias de New Mexico”, agregó Navarro.
Otros activistas dijeron que planean asistir al mitin dentro del centro de convenciones, pero no dijeron si interrumpirían la reunión, como ha ocurrido en otros actos de campaña de Trump.
El precandidato presidencial demócrata Bernie Sanders tiene agendado visitar New Mexico el viernes y sábado. Su adversaria Hillary Clinton no ha agendado una visita al estado antes de las elecciones primarias.
Victor Reyes, un vocero de Clinton para New Mexico, dijo que los puntos de vista de Trump son opuestos a las creencias de muchos residentes de New Mexico.
“Donald Trump no puede engañar a los residentes de New Mexico para que piensen que él tendrá en mente lo que más nos conviene cuando compara a mexicanos con ‘violadores’ y ‘criminales’, cuando ha redoblado su promesa de deportar a millones de familias inmigrantes (…), y continuaría dividiendo a nuestro país de las peores maneras”, dijo Reyes