REDACCION DELAZONAORIENTAL.NET
El ministro de Economía, Planificación y Desarrollo, ingeniero Temístocles Montás, sostuvo que en República Dominicana hay un grave problema de informalidad en el sector productivo, lo que se traduce en que un sector grande no paga impuestos y el resto está muy cargado, dejando al gobierno con menos ingresos de los que necesita para atender las demandas de la sociedad.
Montás dijo que ante esa realidad, el gobierno del presidente Danilo Medina se aferró a la racionalidad del gasto público para disminuir los déficit arrastrados desde 2008 y bajar el endeudamiento público que ha llegado a niveles peligrosos.
“El gran desafío que tenemos en la República Dominicana es cómo abordar el problema de la informalidad productiva. El gobierno está empeñado en apoyar a la Micro, Mediana y Pequeñas empresas para que se formalicen y se hagan productivas”, expresó Montás al ser entrevistado por Homero Figueroa y Lorena Pierre en el matutino televisivo “AN7 al Amanecer”, por Antena Latina.
Agregó que el Estado hace un gran esfuerzo para lograr que lo que hoy es informal, se transforme en formal y la totalidad de la gente que produce riquezas pague impuestos para financiar el desarrollo sobre la base de una sólida inversión en infraestructura y servicios.
“Cuando se habla de la pobreza y la desigualdad a veces se pierde de vista que eso tiene que ver con la dualidad de sectores productivos, pues por una parte hay un gran sector informal escasamente productivo y que no paga impuestos, y luego está el formal que sí los paga”, expresó el Ministro, tras agregar que esa dualidad explica la existencia de los bajos salarios, de acuerdo a una nota de la Unidad de Comunicaciones del MEPyD.
En el caso del Estado, Montás recordó que “casi el 90 por ciento de la nómina pública está por debajo del 33,000 pesos mensuales y esos están exentos del pago de impuesto”, al igual que en el sector privado, lo que limita seriamente la capacidad recaudatoria del gobierno para atender las demandas crecientes de obras y servicios.
Dijo que el Estado tiene demandas equivalentes al 24% del Producto Interno Bruto (PIB), pero solo recibe ingresos equivalentes al 14% del PIB, por lo que ante esa situación el gobierno se aferra a la racionalidad del gasto público para reducir déficits y rebajar el endeudamiento.
“Queremos que se entienda que el país ha llegado a un nivel de desarrollo que el Estado debía estar recibiendo el equivalente de 24% del PIB y no lo recibe” –manifestó el ministro- tras agregar que la sociedad tiene que discutir como conjunto cómo se va a financiar el desarrollo y atender las demandas.
Montás recalcó que los líderes políticos, sindicales, empresariales y sociales “tenemos que discutir cuál es la sociedad que queremos y sentarnos a decidir cómo la vamos a financiar”, porque no se puede dar la espalda a la realidad de que las demandas son crecientes y los recursos limitados para hacerles frente.
“Si queremos tener un crecimiento de 7% anual, deberíamos invertir todos los años por encima del 27% del PIB y la sociedad en su conjunto lo que está invirtiendo es un 18%. Esto tenemos que resolverlo si queremos dar un salto hacia adelante y transformar este país en un país desarrollado”, apuntó el ministro de Economía, Planificación y Desarrollo.
Manifestó que la Estrategia Nacional de Desarrollo preparada por el Ministerio que dirige, aprobada por el Congreso Nacional, establece un pacto por la educación (ya firmado), un pacto por la electricidad y otro de naturaleza fiscal.
“La idea del pacto fiscal vino porque sabemos que con endeudamiento no vamos a resolver los problemas de desarrollo”, apuntó Montás, quien recordó que el pacto fiscal implica definir una política global de ingresos, gastos y financiamiento como un consenso social.
Ante la pregunta de si es factible impulsar una nueva reforma fiscal para hacer frente a las necesidades de ingreso del gobierno, el funcionario dijo que “no es prudente pensar en una reforma tributaria porque ya las cargas son altas y en ese contexto lo que queda es actuar con racionalidad”.
“Una reforma tributaria ahora no sería prudente porque aquí hay un sector productivo muy cargado y hay otra parte del sector productivo que no está cargado porque no paga impuestos. Eso hay que resolverlo pero como este no es el momento oportuno, lo que hacemos es racionar el gasto público desde el gobierno”, puntualizó Montás.
Reiteró que a su llegada al gobierno, “lo que encontró el presidente Medina fue un Estado viviendo por encima de sus posibilidades”, por lo que ante esa situación “Medina resolvió no seguir con ese déficit y se inició un proceso de desmonte, racionalidad en el gasto y depender menos del endeudamiento público”.
En ese camino de lograr racionalidad, Montás recordó que de más de 8% de déficit fiscal encontrado por Medina en 2012, ya este año concluirá con un déficit de 2.8% del PIB y el año que viene sería de 2.4, pero con superávit primario, que es la capacidad de pago de intereses de la deuda con recursos propios.