REDACCION DELAZONAORIENTAL.NET
La doctora Aridia Ferzola, médico epidemióloga, advirtió que todos los dominicanos, sin importar edad, raza o clase social, están en riesgo de enfermarse si reciben picaduras de mosquitos transmisores de la fiebre Chikungunya, nombre de origen Makonde que significa “Enfermedad del hombre encorvado”.
La advertencia la hizo la profesional de la medicina al impartir una conferencia organizada por la Unidad Médica del Centro de Salud Comunitario del Plan de Asistencia Social de la Presidencia, ubicado en la Avenida España #2, sector Villa Duarte, del municipio Santo Domingo Este, y que dirige la Dra. Aura B. Feliz Báez.
La charlista dijo que a diferencia del dengue, que puede ser mortal y ocasionar choque o hemorragia grave, es raro que el Chikungunya produzca la muerte ya que representa una mortalidad de 0.4% en menores de un año de edad, no tiene mal pronóstico y el inicio de las fiebres es más agudo y de duración más corta.
La doctora Ferzola, quien forma parte del equipo médico del Centro de Salud Comunitario, manifestó que en la República Dominicana la enfermedad se registró por primera vez en el municipio de Nigua, San Cristóbal, en febrero pasado y hasta el 29 de marzo el sistema de vigilancia epidemiológica captó 767 casos de personas con síntomas febriles, mialgias y artralgias, sobre todo en los barrios de Galindo y Cambelén, para una tasa de afectados de 4 por cada 100 mil habitantes de la zona.
En cuanto al tratamiento ambulatorio que debe prevalecer, sugirió la ingesta de medicamentos, tales como Acetaminofén o Paracetamol contra las fiebres; Naproxeno o Ibuprofeno para aliviar el componente artrítico de la enfermedad; ingerir abundantes líquidos y en el caso de enfermedad subaguda y crónica para la artritis; es preferible usar inyecciones intra articulares de corticosteroides y fisioterapia.
Como medida de prevención, la doctora Ferzola recomendó eliminar los criaderos del mosquito Aedes Aegyptis, mantener bien tapados los recipientes de almacenamiento de agua, untar cloro líquido dos veces por semana con un paño limpio y empapado, cambiar el agua de los floreros por tierra o arena, y eliminar el agua acumulada en botellas, gomas, latas vacías, donde se crían los gusarapos que se convierten en mosquitos transmisores.
Además, evitar desechos en las calles, patios, callejones y solares, debido a que cuando llueve se convierten en criaderos; usar repelentes de insectos con sustancias como el Deet o Permetrina; uso de ropas pantalones largos, camisas o blusas mangas largas; tratar las ropas con piretroides, que es una especie de insecticidas que a menudo tienen propiedades repelentes; instalar protecciones anti mosquitos en ventanas y puertas (mallas).
A la conferencia, expuesta al público en fecha 9 de mayo del corriente año, asistieron pacientes que reciben asistencia en la Unidad Médica, así como la empleomanía de la institución, integrada por médicos, paramédicos, el personal administrativo y ciudadanos de la comunidad.