REDACCIÓN DELAZONAORIENTAL.NET
La policía de Brasil, ha prohibido que los evangélicos continúen predicando en los trenes de Río de Janeiro. La medida ha sido tomada debido a que los pasajeros se han quejado de las constantes molestias que les provocan los evangélicos cuando se suben a predicar la Palabra de Dios en los vagones de los trenes administrados por SuperVia.
La Justicia, ha determinado la prohibición de este tipo de acciones y ha obligado a la empresa a dejar claro que la ley no permite cultos en medios de transporte público.
Pasajeros reportan que los evangélicos promueven cultos dentro de los vagones provocando mucho ruido, gritando, cantando en voz alta, también hacen uso de instrumentos musicales e incluso atacan verbalmente a los pasajeros de otras religiones.
Debido a estos informes, la 7 º Sala Corporativa de Río de Janeiro, estipuló que SuperVia no permitirá que estos hechos vuelvan a repetirse y, si se producen, los predicadores deberán abandonar el vagón con la intervención de la policía.
Para evitar que nuevos cultos ocurran la empresa responsable de los trenes, deberá colocar señales de advertencia ante cualquier tipo de acción religiosa dentro de los vagones. Si SuperVia, no cumple con esta determinación puede ser multada con 2.328 dólares por día.
El promotor Rodrigo Terra, de la 2ª Promotora de Justicia de Tulela Colectiva y Defensa del Consumidor y Contribuyente, informó que no sólo a los evangélicos se les prohibirá predicar sino a los seguidores de cualquier otra religión, “no pueden hacer manifestaciones religiosas y tampoco avergonzar a los demás usuarios”, advirtió Terra.
En su defensa, SuperVia, dijo que desde el 2009 cuenta con advertencias sobre la prohibición de los cultos religiosos en los trenes y estaciones.