Periodista Teodoro Ruiz (TR williams)
30 años después y ahora la quiero más!
Tiempo suficiente para reafirmar mi agradecimiento a Dios y a la vida por todo lo que me ha sido dado, pues, a pesar de las adversidades confieso que he sido feliz y que he vivido memorias.
Me confieso el hombre más rico del mundo, no tengo bienes materiales que ostentar pero lo que si tengo es mucha dicha y felicidad, la gloria de una familia admirable que motiva mi orgullo y me invita a continuar hacia adelante.
Ella, particularmente ella, ha espiado mis culpas, ha corregido mis errores, ha consolado mis penas y disipado las brumas que embriagaban mi alma. Por ella, la dialéctica se ha incorporado en mí, motivando cambios constantes, adecuándome a la realidad de los tiempos, forjando nuevos futuros de esperanza, de paz, amor y comprensión.
Sencilla, pero firme; así es ella, humilde de corazón, tolerante y fervorosa, en su fe y amor a Dios. Es quien guía mi hogar y me da estabilidad, libertad, ternura y fuerzas para continuar y emprender, junto a nuestros hijos.
No quepo en mi alegría, he sido un suertudo en esta vida; imaginen ustedes, un tipo como yo, ostentando la delicadeza del amor y la belleza, dueño de esta bella flor, cultivada en las verdes montañas de mi tierra, madre abnegada y comprometida, proveedora de virtudes insospechadas, motivo de mis sueños y esperanzas; mi mejor versión y esquema para perpetuar mi esencia en el tiempo.
Maestra por vocación y amante de la verdad, un ser excepcional en el fortuito cambiar de los tiempos, guía y brújula de mi destino.
Como no reiterar mi agradecimiento a Dios padre todopoderoso por haberla puesto en mi camino. 30 años han trascurrido y parece que fue ayer, cuando la vi, aquella tarde en primavera, Soy tan feliz!
Gracias por tu paciencia, por la ternura y la comprensión, gracias por estar ahí, en mis momentos de debilidad, gracias por levantarme cada vez, cuando he caído, gracias por tus cuidados,
por tus desvelos, gracias por mis hijos, tesoros que aquilatan nuestras vidas, gracias por ser tu, sencilla y natural, deidad que protege mi existencia!
Gracias por estos 30 años cabalgando a mi lado y recorriendo los ásperos caminos de la vida, domando realidades y afecciones; sin ti, seguro estoy que no lo habría logrado.
Treinta años ya!
Y los que faltan por venir……..
